Nuestras Fechas Más Importante ¿Consumismo?

Por años los calendarios nos marcan ya fechas importantes y no sólo me refiero a las fechas históricas sino también a aquellas las cuales en realidad no son más que fechas  que se han ido incorporando por el simple motivo de derrochar nuestro dinero en cosas que sólo le conviene a las grandes empresas.

Por ejemplo, se han preguntado ¿Por qué sólo dar obsequios en las fiestas decembrinas?  ¿Por qué sólo mostrarnos afectuosos en esa época del año con nuestros seres queridos?

Sin darnos cuenta las grandes empresas nos han vendado los ojos y sólo nos hacen ver lo que ellos quieren ¿Se han dado cuenta de cuántas ofertas nos rodean en las fechas “importantes” del año? 30 de abril, 14 de febrero, 10 de mayo… y sé que ustedes saben las demás.

El consumismo se ha hecho participe de nuestra vida cotidiana, al punto de hacer que millones de personas sean compulsivas en sus compras, sin ni siquiera ponerse a pensar si en realidad ocupan lo que compran.

¿Pero por qué es tan malo ser parte del consumismo?

Algunos podrán decir que es vuestro dinero y pueden comprarse con él lo que gusten, pero se han preguntado lo que ha estado haciendo el consumismo con nuestro planeta, si, lo estamos destruyendo a costa de “satisfacer nuestras necesidades”.

Grandes empresas como son las textiles destruyen selvas, matan animales sin piedad e incluso los ríos y mares sufren  por los residuos que éstas generan y claro, nuestra basura. Basura que generamos nosotros mismos con esas tantas cosas que un día nos gustan y al otro simplemente desechamos.

Es tiempo de que abras los ojos, te quites la venda y mires a tu alrededor, mira lo que está pasando.

Antes de comprar algo sé consiente y pregúntate si realmente te es útil. No uses como excusas las fechas que te han hecho creer que son únicamente importantes y con esto no quiero decir que le compres a tus seres queridos algo nuevos todos los días, si no de que habrá servido lo antes mencionado. Te quiero dar a entender que puedes demostrárselo diciéndole algo afectuoso todos los días, haciéndoles  saber que estás ahí para ellos. Los obsequios se sienten bien, lo sé, pero se siente aún mejor sentir que puedes contar con alguien en todo momento.